No dejes que nadie te diga lo que no puedes hacer

"Que por más que duela, y con dolor, si vuela, no ha de volver"

jueves, 31 de enero de 2013

Baúl de los recuerdos

Esta mañana recién levantado me he topado con una vieja libreta llena de folios a los que no sé como denominar, en la que encontré esto:

Me gustaría despertar una mañana, 
abrir la ventana y que el único sonido que invada mi habitación 
sea este silencio que persigo,
y presagio, que no es un día normal,
cuando una canción de 'buen rollito' se posa en mi auricular,
empieza a cambiar mi paseo rutinal,
observo que los niños, hoy son niños de verdad,
jugando al escondite, ya no esconden miedos,
solo esconden retos y ganas de avanzar...

Y comienzo a caminar...
En este día mi propósito es que el deber no me ha de atar, 
y fumar, y fumar con Raúl,
nueva paranoia, césped verde y cielo azul,
risas, seis horas en plan gandul,
y si la responsabilidad llama, mejor contéstale tú...

Vuelvo a casa sin prisa, con música y bicicleta,
en ella mi compañero de viaje me espera con su maleta,
ahora nuestro mayor fin, será encontrar nuestra meta,
y descansar, disfrutar, despertar...,
'con niños verdes, de ojos amarillos y de sangre...'
'la sangre ya sabes como es...' 

...Roja, color atardecer.
Y al parecer, ya no existe miedo de crecer,
me quedan mil experiencias por vivir, y no por beber,
y tantas que escribir, otras que revivir,
sentimientos pecadores que optan por reincidir...
Y no quiero otra cosa, que me haga sentir pequeño,
que todo lo que consiga sea por mi empeño,
prefiero ser honrado y vivir inundado en mi sueño. 

Han pasado tres años y las cosas han cambiado pero hay recuerdos que son imborrables. 


Un loco en la colina
J. A. Morales Manrubia
Dedicado a Raúl y todas nuestras paranoias 



miércoles, 30 de enero de 2013

Cae la noche

Caerá la noche pero hay cielos que es mejor contemplar a oscuras. 

Está atormentada la noche, no me deja dormir,
me mira incesante, ¡levántate, ponte a escribir!
Qué querrá hoy de mi, el frío pesa, en pleno mes de Abril.
¿Querrá heridas re-abrir? ¿Verme sufrir?
¡Pero si tengo cicatrices que nunca cerré!,
a veces me gusta mirar al abismo del que regresé,
y prometerme que jamás regresaré.
Es duro verse crecer, tener que despedirse de lo que hice en el ayer.

Hoy no hay películas, no hay música de fondo,
este viejo pensamiento parece haber tocado techo.
Cansado de lo hecho, cansado de vivir sin ponerle precio,
pero la vida sigue, el reloj no se detiene,
hoy me duelen más los segundos que el propio dolor.
Estoy hecho mierda desde la última canción,
tengo el alma en ruinas, lo que un día fue toda una civilización. 
Estoy cansado...

Irónico es el tiempo que vuelve sobre sí mismo,
cambiando actores y pensamientos,
construyendo sobre viejos sueños los primeros cimientos.
Aquella chica que un día amé, no regresará, 
aquella promesa que le hice, no se cumplirá,
alguna vez fue culpa mía, otras no supo esperar,
pero lo único cierto es que me arrepiento, 
de dejarla escapar...

Mejor borrar, si, mejor. 

Un loco en la colina
J. A. Morales Manrubia 

lunes, 21 de enero de 2013

Dialogo. Incomprendido

- Mírame a los ojos. 

+ No puedo, me besarías.

- ¿Esa es tu mayor preocupación? Puedes estar tranquila que no lo haré, no haré nada que tú no quieras hacer.

+ Pero, si te mueres por besarme... 

- No me muero por besarte, ya termine por sucumbir esos pensamientos. No voy a entregar este sentimiento disfrazado en un beso, no, y menos si no eres capaz de morir por el. O acaso creerás que dejaré que utilices tus finos labios como moneda de cambio por estos pensamientos, no, y mil veces no, mis sentimientos no están en venta.

+ A veces no te entiendo...

- Y será por ello que aún no te he besado, aunque me muera por hacerlo

martes, 8 de enero de 2013

Resulta extraño

¿No te resulta extraño?, 
que el café ya no te mantenga despierto,
que ese cigarro consuma tu vida,
que el tiempo sea tan efímero
y que los delirios te condenasen a la bebida.

¿No te resulta extraño?,
el color ocre del banco en el que sentado espero,
los olores de recuerdos pasados de tiempo,
los sueños de niños reflejados en cielo
y los sabores lúgubres que anhelo y deseo.

¿No te resulta extraño?, 
la perdida de ilusión por la vida,
que las únicas sonrisas que veas sean fingidas.
Que las actuales cadenas no sean físicas
y que las nuevas generaciones se sientan libres y no oprimidas.

¿No te resulta extraño?
No te resulta extraño verme tan callado,
como si el paso del tiempo hubiera silenciado este alma en pena.
No te resulta extraño,
como si hubiera pagado con silencios esta tormentosa condena.

A veces, hasta yo me extraño,
gritándole a Dios que, "Que hizo por este viejo cuerpo".
Otras, salgo a dar un paseo,
intentando encontrarme conmigo mismo.

¿No te resulta extraño?,
que acuda a tu cama desnudo fruto de un espejismo,
sabiendo que acabare arrojando palabras al abismo.
No te resulta extraño, como este amor por la luna se aferro en mi ático,
como si esta le respondiese a mi otro yo lunático.

¿No te resulta extraño?,
que te hable de musas, desnudas, sin blusas, 
cuando sabes que siempre fuiste la única

No te parece extraño que halla olvidado,
todo el daño que antaño hicieron tus palabras,
como si hubiera obviado que me sentí engañado, 
esclavo de los sueños que hablabas.

¿No te resulta extraño que después de describirte como musa utópica, 
me levante pensando que sigues siendo la única? A mi no. 

Un loco en la colina
José Antonio Morales Manrubia

sábado, 5 de enero de 2013

Viejos recuerdos de una noche de reyes.

Qué fue de toda esa ilusión antes de acostar, 
de esas carrerillas por los cálidos pasillos,
de esos largos vasos de agua después de cenar, 
qué fue de lo de ver mayores convertidos en niños.

Niños, siempre deberíamos ser,
inocentes con nuestro zapato en la mano.
Niños, nunca debimos crecer,
ilusionados al abrir nuestro regalo.

Eramos tan felices, tan ignorantes, 
pero el árbol siempre estaba lleno,
y las sonrisas de abuelos y padres nunca fueron tan gigantes.

Pero la historia cambio, ya nada volvió a ser lo mismo,
ahora las ojeras en este día no son del optimismo.
Las sonrisas eran fingidas, 
las malas caras no desaparecen en las comidas. 

Todo se volvió mas frió, 
irónicamente la navidad se convirtió en invierno, 
nos contaron las mentiras, 
y no resulto ser nada tierno. 

Hoy los camellos no pasan por mi cama,
los regalos no caben por mi ventana,
pero mantendré la sonrisa intacta por amor a mis hermanas.

Que triste es descubrir el consumismo y materialismo de la navidad, del día de reyes, pero mientras haya una sonrisa en mi casa, la querré celebrar. Ojala fuera un niño ignorante, de pequeño pensaba que los pobres también recibían regalos...

Un loco en la colina
Jose Antonio Morales Manrubia