No dejes que nadie te diga lo que no puedes hacer

"Que por más que duela, y con dolor, si vuela, no ha de volver"

sábado, 29 de marzo de 2014

Poetisa.

La poesía sin ti empieza a parecer poesía,
y joder, cómo llego a odiarla. 
Me dejo los pulmones respirando su ausencia,
y ya nada me recuerda lo lejos que llegamos a estar.
Me dejo las papilas entre cenizas y quejidos,
entre llantos y gemidos, que inundan mis pupilas.
Me dejé, una escusa en la comisura de sus labios,
y el agravio de volver a la escritura.
Se me escapó,
y con las prisas,
olvidé frecuentar las esquinas,
que allí, entre copas y artistas,
acordes y aristas,
vestía desnuda una disimulada sonrisa.
Y que desgracia,
volver a las calles,
que inundadas de lluvia
hicieron bailar a su mejor poetisa. 




miércoles, 26 de marzo de 2014

Derecho a morir.


Cuando los sueños se miden en grados,
cuesta mantener el equilibrio,
y yo, que he besado más vasos que labios
no consigo mantenerme en pie.
Y que jodido es pedirle explicaciones a un quizás,
y tener que cerrar puertas que nunca tuvieron llave.

Y en el fondo,
me da pena dejarte escapar,
pero no puedes parar al tiempo,
ni detener a la primavera,
y es que supongo que no soy tan luchador como creía. 

Con lo bien que me sentaba sentirme un prisionero,
y tuvo que renacer mi alma de pirata
que añoraba un poco de libertad.
Y que triste parece una revolución sin ti,
y perder los motivos por los que luchar.
Al menos nos quedan las victorias,
y la satisfacción da haber perseguido una utopía. 




domingo, 16 de marzo de 2014

Meteorológicamente inestable.

Y ya. Esto que llamas calma no es más que el descanso de los vientos, un caos intranquilo que aparenta normalidad. Y por qué será que los huracanes tienen nombre de mujer, y yo, que solo sé huir a las zonas cálidas y terrenálmente estables me empiezo a mojar en sus lluvias tropicales y a imaginarme espejismos en forma de paisajes como si fuera a encontrar la paz en una botella de cristal. Me parece cosa de locos, que te compare con fenómenos meteorológicos en una noche de cielo despejado y sin ruido en las calles, y será que necesito que alguien rompa con ese espacio y esa falta de sonido, que vengas y que cambies los muebles de sitio, que seas el terremoto que ponga en crisis a este soñador con miedo a las alturas, y emborraches de lluvia a las calles, que quiero verte bailar, al menos hasta que pase la tormenta.


sábado, 15 de marzo de 2014

Sucio.

Voy a perdonarme las caladas en las venas,
los miércoles de resaca,
y cada uno de mis delitos.
Voy a perdonarme,
por prostituir sentimientos en camas ajenas,
y cerrar y abrir puertas y ventanas,
dejando que la corriente nos termine de vaciar.
Voy a perdonarme,
por sentirme sucio,
y dejaré que la falta de whisky en el vaso haga el resto.


lunes, 3 de marzo de 2014

Puertas.

Canta, grita, rabia, escupe,
tírame el cubata, 
o cambia los muebles de sitio, 
pero si te vas a marchar,
cierra la puerta,
no dejes ventana abierta,
ni hueco entre persiana y persiana,
que haré de ese espacio mi peor hobby.
 Convertiré en vicio cada letra que se te escape,
cada cigarro a medio apagar,
o esas despedidas con aire a final.
Y sé que nadie puede entenderme,
alguna cana al aire,
o tres o cuatro pisotones en cada baile,
pero nadie me entiende,
y es que odié dejar las puertas abiertas,
que ya no es que te engañe a ti,
ahora engaño a otra,
y ésta se encontró con las puertas cerradas. 


sábado, 1 de marzo de 2014

Reacciona.

Cierra los ojos.
Vas a permitir que las cadenas nos hagan sangrar,
y prefieres cerrar los ojos...
Cambia, abre los ojos,
"sé el cambio que quieras ver en el mundo"...

Cambia,
que somos piezas de un mismo puzzle,
que lleva en su ADN la necesidad de ser solo uno.
Grita,
que sus oídos sientan el miedo de un pueblo hambriento.
Respira,
que este aire nos pertenece,
y con rabia nos lo quitan. 
Sé que el miedo puede cambiar de bando,
he visto calles arder en solidaridad con un solo barrio.

Y es miedo.
Miedo es lo que tienen cada vez que abres un libro,
o apagas la televisión para defender tus derechos.
Miedo es por lo que no invierten en educación,
y prefieren verte marchar del país.
Miedo es lo que tiene mi madre cada vez que le hablo de cambiar el sistema,
pero miedo también es que mis hijos tengan que hacerlo,
y yo no haya hecho nada, eso es vergüenza.

Dejemos nuestros miedos,
librémonos de estas cadenas,
como pájaro que abandona el nido,
y emprende su propio vuelo.

Pirata

He convertido mis ojos en árbol de otoño,
y aún confío en que hayas llegado tarde.
Y quién sabe si nos estábamos equivocando de mapa,
o es que perseguíamos tesoros diferentes. 
Quizá yo busqué seguirte,
y tú solo pretendías que no lo hiciesen, 
y es que en el fondo, 
dos piratas no están hechos para compartir cama-rote.