No dejes que nadie te diga lo que no puedes hacer

"Que por más que duela, y con dolor, si vuela, no ha de volver"

jueves, 25 de diciembre de 2014

Ella

La quise,
porque humana ella,
me enseño a volar
y no tener miedo.

La quise,
porque congelando el tiempo
conseguía que las manecillas del reloj
siempre apuntasen hacia ella.

La quise,
porque saciaba la sed de mi ser
y no lo desgastaba.

La quise, y la quiero,
porque sufriendo por el dolor ajeno
lo hacía propio.

La quise, y la quiero,
porque gritó y no se resigno.

La quise, y la quiero con miedo
con miedo a morir de amor.


domingo, 30 de noviembre de 2014

Reflejo del alma.

Encasillada la inspiración;
asesinada a traición, 
el alma,
no quiere ser poeta.

Una bala en mi costilla izquierda,
otra reyerta,
otra despedida, otro adiós,
otra cicatriz que aún es herida abierta.

Otra noche,
otra promesa,
otra vez sin voz,
otra vez poeta. 


domingo, 16 de noviembre de 2014

Mundos distintos

Imagínate a dos mil kilómetros de distancia,
ciudades que no se sitúan en los mapas
y fronteras que aún no han caído.
Idiomas distintos,
culturas distintas,
sueños distintos,
y formas de decirnos que "no"
de manera distinta.
Espacios temporales que no cuadran el reloj,
años, siglos, milenios,
calendarios que no comienzan con el nacimiento de ningún mesías.
Imagínate,
universos paralelos,
planetas sin banderas
e islas desiertas sin botellas,
ni mensajes de despedida.
Imagínate, imagíname,
desnudo,
expuesto a cualquier terremoto,
tormenta, huracán
o circunstancia adversa,
pero imagíname, cerca,
que si hemos vencido siglos,
distancias y circunstancias que no quisimos llamar destino,
que al menos no haya sido en vano.


miércoles, 1 de octubre de 2014

Calado

Verte y lloverte a deshoras...

Hace tiempo que callo
y obedezco indeciso
secretos que ya he contado.

Hablar del tiempo...
y decir...

Murcia está inundada
y sus ventanas se resguardan
de miradas indiscretas.

Pero yo,
quiero hablar de ti.

Y dejarte helada;
congelar los relojes
y que saques las botas de agua.

Quiero que nos mojemos....

Hacer del charco un oasis
y verte sonreír como una niña
porque hoy no toca ir a clase.

Y es que ha llovido.

Y que poco nos mojamos cuando llueve,
por mucho que acabemos calados,
no nos mojamos.



sábado, 27 de septiembre de 2014

Se supone...

Se supone que debo sonreír 
y que el nudo de la garganta 
se descompondrá con alguna droga cara,
si ésta no consigue consumirme antes.

Se supone que debo empezar de cero
cuando tengo en números rojos 
la cartilla del banco
y apenas recuerdo eso de olvidar.

Se supone que debo de vestir bien
y conformarme con un trabajo de mierda;
aprender a callar
y escupir toda la rabia sobre la barra de un bar.

Se supone que no he de romper con lo establecido,
y que las mañanas comiencen cuando el despertador me lo ordene. 






lunes, 15 de septiembre de 2014

Viajero

Si algún día no estoy, 
no me busquéis.

Dejad que me encuentre a mi mismo, 
que descubra cada uno de mis defectos
y sepa encontrar mi sitio.

Dejad que caiga rendido,
que tropiece diez veces con la misma piedra, 
y no pueda levantar cabeza.

Dejadme en el suelo,
que agrietadas las manos de sangre y sudor
sepan levantarse solas.

Olvidarse de que existo,
de que un día existimos juntos,
y que aquello tuvo un nombre.

Olvidarse si no regreso,
dejadme que no regrese, 
y solo sea un recuerdo.

Recordadme partiendo,
destruyendo andenes y pistas de aterrizaje,
hasta que ya no exista.

Y recordadme como aquel chico 
que quiso marchar 
y no supo pedir auxilio.


miércoles, 3 de septiembre de 2014

La niña de la biblioteca.

Al final ella resultó no ser un gato,
y aún así necesitaría 7 vidas 
para encontrar las palabras que de verdad se merece.

Para ella era el chico rojo de la mani,
para mí, la niña con trenzas de la biblioteca
y esa ausencia de palabras 
la primera vez que nos cruzamos.

"Estudio más por verte que por vocación";
creo que contigo, al fin,
encontré el significado 
de aquella frase de Pedro Pastor. 

Y es cierto que yo solo quería verte,
aunque fuera para auto-convencerme
de no ser tan solo un producto de mi imaginación. 

Para ella fui el chico con cara de duende,
para mí, la chica inalcanzable
que terminó por derribar todas mis curiosidades. 

Ella era capaz de robarme el sueño;
y de hacerme sentir 
que hasta ese momento
había estado perdiendo el tiempo. 

Para mí fue romper un círculo de silencio,
como si ya hubiera estado demasiado tiempo callado,
y necesitara conocerla un poco más.

Ella era capaz de sonreír,
y de guardar en su hoyuelo derecho
el quiero y no debo
de las ganas de besarnos. 

Ella era preciosa,
y capaz de hacer de 'Bellas'
la mejor canción de un festival de rock. 


martes, 2 de septiembre de 2014

Yo no quiero soñar;
ni aprender a sonreír por compromiso.
Yo no quiero dormir
imaginando su rostro sudando sobre el mio.
Yo no quiero escapar,
y así abandonarte de mi suerte.
Yo no quiero trenes,
ni viajes al pasado.
Yo no quiero espacios en blanco
ni tinta sobre el lagrimal.
Yo no quiero días grises,
y si noches felices,
sin final.
Yo no quiero excusas,
que de excusas estamos todos un poco hartos.







jueves, 28 de agosto de 2014

Relato de un suicida

"Tenemos que volver a aprender a sonreír", -le dije al hombre triste del espejo-. Y él apenas hizo caso. Era más grande la pena, y él mismo sabía que sonreír solo era otro espejo, pero esta vez sin reflejo.
Se contemplaría, y sabría de su falsedad. Ser otra fachada, su propia fachada, una mentira que se propagaría por su mente hasta hacerla enloquecer.

El hombre seguía inmóvil en el espejo, y yo ya no sabía como actuar. Me quedé quieto y solo a través de mis ojos podía comprender que seguía vivo. Sentía que mis ojos respiraban, que aceleraban el ritmo, aunque nada a mi alrededor se moviese.

El hombre del espejo me miraba, y yo no comprendía nada. Sentía que la sangre no me corría por la cara y un color blanquecino se posaba sobre ella.

Cada vez más pálido e inconsciente por mi situación, cuando por fin, el hombre del espejo sonrió. Él sabía lo que me estaba pasando, y yo no quise preguntar.

Las luces se apagaban, pero no había nadie cerca apretando el interruptor. Yo no entendía nada, pero el hombre del espejo ya no era el mismo.

Cuando al fin entré en valor para preguntar sobre lo que estaba pasando, ¿qué hacía allí? ¿quién era yo? y sobretodo ¿quien era el hombre del espejo y por qué no quería sonreír?, me desplomé.

Quizá yo ya llevaba demasiado tiempo tumbado en aquel frío suelo pero no quería aceptarlo, quizás no había nadie en ningún espejo, y quizás el espejo terminó por ser un techo en el que se reflejaba mi propio recuerdo.

Quizás ya era demasiado tarde, pero conseguí volver a sonreír, aunque solo sea para despedirme de mi mismo.


lunes, 25 de agosto de 2014

Drugs

Incrustado el sabor de la muerte en mis labios, y decidido a convertir en cenizas todo recuerdo de un pasado mejor, me dejé llevar por el superfluo olor que desprendían aquellos dos cuerpos que anhelaban una muerte conjunta.

Perdido en una vida entre andenes y el peso de unos ojos que se despiden agazapados; las heridas de una noche de sobredosis emocional, el veneno que vuelve la sangre fría antes de matarme de la forma más dulce posible.

Adiós a la responsabilidad, a la vida que eligieron otros por mi, la vida de anuncio de televisor, adiós a la vida, a las razones por las que vivirla, "no hay razones, ¿quién necesita razones cuando tienes heroína?"

lunes, 28 de julio de 2014

Dos sin nadie

Era la historia de dos sin nadie...

Ella no entraba entre sus planes, 
y puede que él no tuviera la mera intención de vivirlos.
Ella no era lo que él estaba buscando,
como si dieran por hecho que necesitaba encontrar a alguien.
Ella no pretendía conocer a un tipo como él, 
y él no pretendía que nadie le conociera tanto.
Ella a penas supo decir palabra, 
y él esperaba que su acelerada respiración no enturbiara sus pensamientos.
Ella era humana,
él era humano, 
y ambos sabían que  terminarían por enamorarse.
Ella era realista,
él un soñador.
Ella prefería vivir en sueños, 
y él transformar la realidad.
Ella era locura, 
por mucho que se disfrazara de calma.
Él era cuerdo, 
por mucho que tratara de hacerse el tonto.
Ella era poesía,
él era arte dramático.
Él era inspiración, 
y ella fue su folio en blanco.
Ella era la flor,
él el desierto,
y ambos necesitaban del mismo agua.
Ella era deseo, 
él fue su pecado.
Ella fue insurgente,
él su revolucionario.
Ella fue,
y él quiso serlo,
pero no terminaron de conocerse.


martes, 22 de julio de 2014

Cobarde

A veces pienso en ella;
a veces pienso que ella piensa en mi,
a veces son demasiadas ocasiones
y me da por pensar sin ti. 

A veces me aferro a un clavo ardiendo
y tiro la primera piedra;
escondo la mano, o la sonrisa,
pero jamás la verdad. 

A veces me falta el aire...
El sueño.
A veces nunca es tarde...

No te solía soñar, y hoy te sueño. 
No me acostumbro a despertar
y querer seguir durmiendo. 

Llámame cobarde, 
pero entre sábanas 
todo me parece más fácil...



martes, 1 de julio de 2014

La realidad.

Empiezo la casa por el tejado,
y total, a mi ya no me importa.
Empezar a vestirme por los pies
y dejar el protocolo a un lado. 
Levantarme con el pie izquierdo
y tener la suerte de que sigas en mi cama,
aunque dudes si echar a volar
o exprimirnos lo que queda de mañana. 
Y es que en el fondo, me encanta
 cuando su dulzura se viste de duda
y yo trato de desvestir la realidad.

Y es que la realidad es otra,
yo soy otro, 
y me levanto con el pie derecho.
Trajes con corbatas 
que esconden arañazos por el cuello
de una noche de mentiras.
Mañanas de rutina
y café caliente que irrita mis encías.
Las horas del reloj, 
los minutos en el anden,
los segundos de gente que pasa a tu alrededor
y ni siquiera sonríe. 

Esa es la realidad,
de los que soñamos despiertos,
de los que aún vestidos con traje de seda
prefieren llevar la armadura a cuestas.
Los del anden,
los de las prisas por llegar a fin de mes,
que al menos tengamos una escusa que nos asfixie.
La realidad de los que sueñan que besan,
de los que besan soñando,
pero no se dejan engañar
y mantienen los pies en el suelo. 




lunes, 30 de junio de 2014

La isla.

A veces, 
me entran dudas 
y predico navegar 
en un mar de contradicciones 
que no suele terminar
en buen puerto. 

Otras salgo a flote, 
y trato de no hundir 
en desilusiones 
la poca esperanza 
a la que se aferran 
aquellos piratas 
por encontrar su tesoro. 

Y es que cansado 
de los gritos de socorro 
y los mensajes embotellados, 
que tuve que lanzar, 
hice de esta isla 
mi prisión con vistas al mar.





jueves, 26 de junio de 2014

Novia a la fuga

Cansado de ese amor burgués
del que no se desprende renuncia,
salvo con la muerte.
Y habla ahora 
o calla para siempre;
y que los latidos
silencien campanas de boda
si grito su nombre.
No hay lugar a dudas
entre certezas efímeras
y tiempos verbales
que conjugan una muerte anunciada,
que prefiero una novia a la fuga
y noches sin luna
antes de arrepentirme
de haber callado.


domingo, 22 de junio de 2014

El lado oscuro del reloj.


Lo bonito de su sonrisa es que podría enamorar espejos
y aún así, quedarse con las ganas de echar a volar, triste. 

Que cansado de luchar contra toda gravedad
me he visto aferrado al péndulo de su ombligo.

Y es que mi reloj necesita de un cardiólogo,
que ponga en hora este maldito órgano vital que es el tiempo.

Quiero hacerle el juego sucio a tus folios en blanco,
y ver que por fin, vuelas. 


jueves, 12 de junio de 2014

El peor poema del mundo.

Sabes, hoy he vuelto a ser yo mismo;
me he mirado al espejo 
y no he tratado de huir.

He asumido que soy un cobarde,
que no siempre voy a estar para mi.
Que quién calla otorga
es porque no se ha parado a escribir. 

He asumido los buzones oxidados,
los mensajes a las 3 de la mañana
y que antes entra un murciélago
que el amor por mi ventana. 

He asumido que nadie me entienda,
o a no dar ni recibir explicaciones,
que cuando las preguntas duelen
no siempre hay que buscar respuesta.

He asumido que las matemáticas 
no siempre estén de mi parte,
que diez poemas no sean poesía
y que morir pueda ser un arte. 

He asumido que dos soledades,
no tienen porque formar una compañía,
y que es preferible llegar tarde
que auto-condenarse a la tiranía. 

He asumido que si me dejan 
puedo escribir el peor poema del mundo,
destruir, si me dejan
mi vida en un segundo. 


sábado, 17 de mayo de 2014

La brevedad de los días.

Triste placer mundano;
efímera quimera, 
que nunca nos prometimos.
Ya nada queda.

Lo siento amor, 
pero con rabia no sé escribirte; 
y tú ya encontraste quien lo hiciese.

Solo ha pasado el tiempo,
pero ya le diste mi papel a otro,
y sin cortes, ni escenas finales
tuve que aprender que somos sustituibles. 




lunes, 12 de mayo de 2014

Cupido

Sigues empeñada 
en hacerte creer que sabes amar, 
y no hay quién te entienda.

Prefieres seguir con tus pájaros en la cabeza,
las mariposas en el estomago,
y tus recuerdos 
escritos en el vaho de un espejo antiguo. 

Estás empeñada en seguir desnuda,
expuesta a caer en la cuenta
del porqué dejaste de amar;
y no hay quién te entienda.

Te he visto bailar sobre la cuerda floja
y derrumbarte 
si te daban alas.

Sigues empeñada 
en enfrentarte a Cupido
y ganarle su última flecha
jugando a la ruleta rusa. 

Sigues empeñada,
pero algún día aprenderé
que el mayor acto suicida
es dejar de amar. 



martes, 6 de mayo de 2014

Mente descosida.


Otro monólogo absurdo de gemidos imaginarios,
y mis ganas de sentirte dentro.
Dentro de mi cama, o de mis sueños,
que se desvanecen en el sexo más ridículo. 

Otro epitafio al sudor de tu pecho
y los arañazos que sangran mi espalda.
Miradas sucias y agazapadas,
que esquivan unos ojos hambrientos.

Otra guerra sin armadura,
de esas en las que sobra la ropa
y los títulos nobiliarios.

Otra crónica de muerte anunciada
y el vértigo de caer en su sonrisa,
justo en su hoyuelo derecho. 


jueves, 24 de abril de 2014

Ochenta y tres años después.

Ochenta y tres años después,
te hemos visto volar,
y aún representas la esperanza.
Ochenta y tres años después,
aún no se ha hecho justicia,
y sigues tan hermosa como siempre.
No eres polvo viejo,
eres una de esas dos Españas,
esas que Machado recogió en algún verso.
Ochenta y tres años después,
reconocen tu dignidad,
que a punta de fusil 
no lograron arrebatar. 
Ochenta y tres años después,
nos sigues haciendo soñar,
cada 14 de abril,
que te hacen ondear. 
Ochenta y tres años después,
seguimos pidiendo igualdad,
libertad y solidaridad.
Ochenta y tres años después
nunca es tarde,
para volverte a recordar. 




domingo, 20 de abril de 2014

Sentir.

Me siento mudo,
como si las palabras vistiesen y desvistiesen, 
y el frió empañase de sal estos ojos.
Todo cae hacia el vacío,
y ya parece demasiado tarde
para repetir otra despedida. 
Me siento ausente,
incapaz de llenar mi propia ausencia.
Demasiados precipicios,
y un miedo abismal a las alturas.
Otra sobredosis de vértigo,
que deja marcada mi piel.
Me siento a esperar,
como si fuera un mero espectador
de mi propia vida.
Veo la vida pasar,
formando paisajes imaginarios
que tengan un peor final que mi historia.
Me siento a escribir,
y no es que no tenga nada que decir,
es que prefiero callar,
a que tenga que hacerte
o hacerme daño.
Me siento, y en el fondo eso es estar vivo.



jueves, 17 de abril de 2014

Fatídico.

El negro de mis venas 
es el veneno que siembras 
y después no recolectas. 

Irónico.

No hay nada más destructivo
que interrumpir mi sueño 
para soñar contigo.

Agónico.

Verter tinta sin anestesia,
y esperar a que el puñal
traiga la inspiración. 

Fatídico

Que si lo nuestro fue una guerra,
lo mio fue un acto suicida...
Morir solo por no morir sin ti.


miércoles, 16 de abril de 2014

Existo.

Yo existo porque la guerra existe, 
y la muerte aún no ha venido a llevarme.
Yo existo porque la pluma no se detiene
y mis paredes gritan tu nombre.
Yo existo porque el aire es tóxico
y respiro muerte.
Existir es una burla, un engaño,
que dioses recitan en lenguas muertas.
Existir es de necios,
de seres apagados en su propio miedo.
Lo único vivo es la muerte,
y yo existo para derrotarla,
o al menos para que a ésta le cueste llevarme. 


domingo, 13 de abril de 2014

XXI

Son veintiún años a la espalda
y la conciencia de no haber vivido mucho más.
Tengo otra de esas noches
de traer el otoño a mi calendario,
y tirar cada uno de mis días
después de un largo invierno.
Apenas gasto tiempo en contemplar a la luna,
y es que me acostumbré
a que las cosas que me gustan
sigan su ritmo natural de vida,
y que siempre, estén, inamovibles,
esperando a que tome la mejor decisión posible. 
Y que jodida indecisión la de seguir sin estar vivo,
y hallar nuevos vicios 
que maten, 
al menos,
a este poeta suicida. 


jueves, 3 de abril de 2014

Cae la noche II

Otra noche de alcobas vacías,
de sueños marchitos,
de voces que susurran denunciar a la luna.

Noches, 
de manta y espada,
canciones de guerra, 
de miedos sin nada.

Ausentes,
de lunes sin semana,
meses sin año,
años sin estar para mi...

Otra noche de 'peta' y cama,
y reflexionar sobre mentes en blanco,
hasta alcanzar el sueño.


sábado, 29 de marzo de 2014

Poetisa.

La poesía sin ti empieza a parecer poesía,
y joder, cómo llego a odiarla. 
Me dejo los pulmones respirando su ausencia,
y ya nada me recuerda lo lejos que llegamos a estar.
Me dejo las papilas entre cenizas y quejidos,
entre llantos y gemidos, que inundan mis pupilas.
Me dejé, una escusa en la comisura de sus labios,
y el agravio de volver a la escritura.
Se me escapó,
y con las prisas,
olvidé frecuentar las esquinas,
que allí, entre copas y artistas,
acordes y aristas,
vestía desnuda una disimulada sonrisa.
Y que desgracia,
volver a las calles,
que inundadas de lluvia
hicieron bailar a su mejor poetisa. 




miércoles, 26 de marzo de 2014

Derecho a morir.


Cuando los sueños se miden en grados,
cuesta mantener el equilibrio,
y yo, que he besado más vasos que labios
no consigo mantenerme en pie.
Y que jodido es pedirle explicaciones a un quizás,
y tener que cerrar puertas que nunca tuvieron llave.

Y en el fondo,
me da pena dejarte escapar,
pero no puedes parar al tiempo,
ni detener a la primavera,
y es que supongo que no soy tan luchador como creía. 

Con lo bien que me sentaba sentirme un prisionero,
y tuvo que renacer mi alma de pirata
que añoraba un poco de libertad.
Y que triste parece una revolución sin ti,
y perder los motivos por los que luchar.
Al menos nos quedan las victorias,
y la satisfacción da haber perseguido una utopía. 




domingo, 16 de marzo de 2014

Meteorológicamente inestable.

Y ya. Esto que llamas calma no es más que el descanso de los vientos, un caos intranquilo que aparenta normalidad. Y por qué será que los huracanes tienen nombre de mujer, y yo, que solo sé huir a las zonas cálidas y terrenálmente estables me empiezo a mojar en sus lluvias tropicales y a imaginarme espejismos en forma de paisajes como si fuera a encontrar la paz en una botella de cristal. Me parece cosa de locos, que te compare con fenómenos meteorológicos en una noche de cielo despejado y sin ruido en las calles, y será que necesito que alguien rompa con ese espacio y esa falta de sonido, que vengas y que cambies los muebles de sitio, que seas el terremoto que ponga en crisis a este soñador con miedo a las alturas, y emborraches de lluvia a las calles, que quiero verte bailar, al menos hasta que pase la tormenta.


sábado, 15 de marzo de 2014

Sucio.

Voy a perdonarme las caladas en las venas,
los miércoles de resaca,
y cada uno de mis delitos.
Voy a perdonarme,
por prostituir sentimientos en camas ajenas,
y cerrar y abrir puertas y ventanas,
dejando que la corriente nos termine de vaciar.
Voy a perdonarme,
por sentirme sucio,
y dejaré que la falta de whisky en el vaso haga el resto.


lunes, 3 de marzo de 2014

Puertas.

Canta, grita, rabia, escupe,
tírame el cubata, 
o cambia los muebles de sitio, 
pero si te vas a marchar,
cierra la puerta,
no dejes ventana abierta,
ni hueco entre persiana y persiana,
que haré de ese espacio mi peor hobby.
 Convertiré en vicio cada letra que se te escape,
cada cigarro a medio apagar,
o esas despedidas con aire a final.
Y sé que nadie puede entenderme,
alguna cana al aire,
o tres o cuatro pisotones en cada baile,
pero nadie me entiende,
y es que odié dejar las puertas abiertas,
que ya no es que te engañe a ti,
ahora engaño a otra,
y ésta se encontró con las puertas cerradas. 


sábado, 1 de marzo de 2014

Reacciona.

Cierra los ojos.
Vas a permitir que las cadenas nos hagan sangrar,
y prefieres cerrar los ojos...
Cambia, abre los ojos,
"sé el cambio que quieras ver en el mundo"...

Cambia,
que somos piezas de un mismo puzzle,
que lleva en su ADN la necesidad de ser solo uno.
Grita,
que sus oídos sientan el miedo de un pueblo hambriento.
Respira,
que este aire nos pertenece,
y con rabia nos lo quitan. 
Sé que el miedo puede cambiar de bando,
he visto calles arder en solidaridad con un solo barrio.

Y es miedo.
Miedo es lo que tienen cada vez que abres un libro,
o apagas la televisión para defender tus derechos.
Miedo es por lo que no invierten en educación,
y prefieren verte marchar del país.
Miedo es lo que tiene mi madre cada vez que le hablo de cambiar el sistema,
pero miedo también es que mis hijos tengan que hacerlo,
y yo no haya hecho nada, eso es vergüenza.

Dejemos nuestros miedos,
librémonos de estas cadenas,
como pájaro que abandona el nido,
y emprende su propio vuelo.

Pirata

He convertido mis ojos en árbol de otoño,
y aún confío en que hayas llegado tarde.
Y quién sabe si nos estábamos equivocando de mapa,
o es que perseguíamos tesoros diferentes. 
Quizá yo busqué seguirte,
y tú solo pretendías que no lo hiciesen, 
y es que en el fondo, 
dos piratas no están hechos para compartir cama-rote.


domingo, 16 de febrero de 2014

Sé ··············································· (Con vídeo)

Sé que no existe el lugar perfecto,
que no hay espacio físico en el que tu cuerpo vista al mio
sin que uno de los dos acabe desnudo.
Sé que no voy a esperar un tiempo que no me sobra,
ni voy a volver a hacer girar este reloj de arena.
Sé que mis mañanas no tendrán un café caliente,
ni con quién compartirlo,
ni con quién compartirme,
cada Lunes por la noche.
Sé que estoy más cerca de dormir
que de seguir soñando,
y apenas me apetece despertar.
Sé que en mi gusto por encantar
terminé de odiarme,
pues uno se cansa de fingir una realidad.
Sé que esto parece cosa de locos,
como cuando ven bailar los sordos,
pero más extraño sería que lo vieran los ciegos,
y estos, se hicieran los cuerdos,
para impresionar.
Sé que existe el lugar perfecto,
y es lo bonito de las palabras,
que se pueden cambiar.

https://www.youtube.com/watch?v=U6oscGSXdZc

sábado, 15 de febrero de 2014

...

Uno se cansa de levantar barreras sobre trincheras vacías,
y de esperar a que en la próxima parada alguien suelte un "quédate".
Y es que la coraza se nos empieza a quedar pequeña,
y por algún lado empezaría a agrietarse.
Te parecerá ridículo que te envíe cartas con el perfume de nuestra primera cita,
o que al final de cada noche,
sienta la necesidad de descomponerme entre tus sábanas.
Pero que puedo hacerle,
la coraza ya no impide que se nos noten las ideas,
o la falta de ellas,
que cada beso es un tatuaje interior,
y un viaje por los caminos más inhóspitos.
Y será que quiero viajar, perderme y desaparecer,
entre los cuentos que me invento para volver a verte.




Dos puntos

Eran gusanos de seda en el estomago 
que no llegaron a ser mariposas,
principios de dejemos de ser personas, 
que las personas desaparecen.
Eran caricias,
que no llegan a ninguna parte,
y mareos en el vientre.
Eran casualidades que no quise llamar destino,
y números de teléfono que no daban señales de supervivencia.
Un espacio, entre el cigarro de después,
y ese café por la mañana.
Un espacio,
de dejemos que el tiempo nos consuma,
y la suma de dos cuerpos que sudan bajo la misma luna.
Una calle que aún no hemos visitado,
y un tejado, 
que añora los violines que el ruido ha silenciado.
Eran ombligos,
centros del universo,
complejos entre tercios y botellas de ginebra.
Era ese bar,
y la camarera que llevaba la cuenta,
esa cuenta atrás, 
que me hacia llegar tarde,
(hacia ninguna parte).
Un paseo,
y un mercado ambulante,
esa moneda de cambio,
que solo tenía valor contable.
Un par de letras,
que no llegaron a ser palabras,
y esas palabras que apenas pronuncié.
Quizá ni sepa de lo que hable,
aunque suela hablar demasiado.

sábado, 1 de febrero de 2014

Que no se repita la historia

Los cielos grises no acaban,
ahora los llaman los verdes,
azules son los que embargan,
y  dividen esta España.

Vientos del pueblo que nos regresan,
principios de incertidumbre,
que el yugo ahoga incesante
y condena a la servidumbre.

Gritos que no silencien,
al rayo que no cesa,
que entre buitres y cuchillos
solo siembran tristeza.

Guerras y guerrillas,
valentía en las laderas,
puños que labran mi tierra,
libertaria es su bandera.

Unionenses de la sierra minera,
que descansan sin ver el sol
Cartageneros de brutal resistencia,
que lucharon con honor.

Murcianos de dinamita,
nos toca despertar,
vuelan tiempos difíciles,
el pan habrá que sudar.

El futuro desvanece,
pero yo prefiero luchar,
que no se repita la historia
de dejar de respirar.

Jose A. Morales Manrubia
Un loco en la colina

lunes, 27 de enero de 2014

Sudar.

Hablemos de sudar 
y pongamos en entredicho 
que mañana, tras despertar,
la cama no va a oler a ti.
Te despertarás.
Harás de las sábanas tu mejor vestido,
y me abandonarás,
dejándome a piel descubierta.
Pero quizá mañana sea tarde,
o demasiado pronto,
y nos permitamos echar el último,
que no tiene porque ser de despedida...

J.A.Morales Manrubia
Un loco en la colina

sábado, 25 de enero de 2014

De vuelta

Se puede decir que ya estoy de vuelta,
tratando de medir cada una de las palabras que escribo,
no sea que no sepan chocar con nuestra circunstancia
y termine por crear un mensaje de autodestrucción.

Pero joder,
con lo bonito que podría ser tintar el cielo de poesía,
y tener que conformarnos con manchar el mismo borrador...
Con lo bonito que sería pasear desnudos por las calles,
y ver que tras los burlos y detalles de las gentes,
ellos son los infelices.
Y que precioso debe ser humedecer tus labios,
y no tener que salir corriendo porque la habitación se nos haga pequeña.

Pero se puede decir que ya estoy de vuelta,
y esta vez no voy a romper con las palabras,
no sea que no sepan chocar con nuestra circunstancia,
y me enganche a la autodestrucción.

Pero joder,
con lo bonito que es desnudarte en versos,
y tener una caricia reservada para el final de cada noche.
Con lo bonito que es que nos despidamos con una sonrisa,
y que los besos se nos queden en la retina,
con ganas de salir a flote.
Y que precioso es ver amanecer a través de tus cortinas,
y que no tenga la necesidad de medir mis palabras...

lunes, 20 de enero de 2014

Utopía

Que los fusiles dejen de cargar balas,
que caigan todos los muros,
que volar no dependa de las alas,
y que amar sea un sentimiento puro.

Que tu cuerpo no entienda de fronteras,
ni se halle acomplejado,
que de vuelta a las ojeras
de tus ojos sea impregnado.

Que la poesía domine el mundo,
y que la música le acompañe,
que vivir sea un segundo,
o atento a que este se pare.

Que las guerras no ametrallen,
ni decidan sobre mi hambre,
que solo versos disparen,
los soldados que aún no nacen.

Que la cruz tache a la tilde,
y dejemos el amén,
que bastantes silencios traen los rifles,
para que me tenga que callar un "AMEN"...











martes, 14 de enero de 2014

¿A quién no le gustan las sorpresas?

Me encanta cuando te vistes de mujer,
y tratas de romper con cada una de las cadenas
que te mantiene atada a mi soledad.
Pero luego vuelves,
me embistes,
y renuncias a todo complejo,
como si los labios no tuvieran ojos,
y mis dedos no necesitaran recorrer
una y otra vez cada uno de tus rincones.
Y me encanta lo de anclarme en tu clavícula,
y quedarme a cuadros,
cada vez que me da por rayarme
contando cada uno de los lunares que tienes en tu espalda.
Y será que uno se cansa de los triángulos amorosos,
y de toda forma geométrica,
que impida que dos puntos se encuentren en una única linea recta.
Y será que me encanta lo de ser un intruso en cualquier mente ajena,
y recibir visitas inesperadas,
porque ¿a quién no le gustan las sorpresas?

lunes, 6 de enero de 2014

Game Over

Que pronto nos cansamos del juego...
del tiro al blanco, del azar, y de la tirada de un dado.
Del puenting sin cuerda que nos vacía sobre el vacío,
o el final de la partida tras la condena de mi hastío...

Que pronto nos cansamos del juego...
de la perfección de los cuadrados de aquel tablero,
y de tratar de hacerte correr con la última ficha de la partida.

Tú tan reina con libertad de movimiento,
y yo tan caballo con la "L" enmarcando el arrepentimiento,
como si no importara el comienzo,
pues todo termina cuando desees ponerle fin al sufrimiento.

Y que pronto nos cansamos del juego...
Ahora lucho por salir vivo del busca-vidas,
aunque mi otro yo suicida quiera detonar alguna mina,
y al menos así no esté presente, si se presenta una despedida...

jueves, 2 de enero de 2014

Carta extraviada

Yo era de guerrilleras hasta que te encontré,
cambiaste la capucha por la diadema de princesa
y seguías siendo tú.
Princesa guerrillera que revolucionó mis cinco sentidos,
me dejé vencer...
Dejé que trajeras palabras de libertad a esta mente encadenada.
Rompiendo con ellas, construiste la más bella de las utopías,
y sin ni siquiera prometérmelo me dejaste habitar en tu anarquía.
Como para no querer agradecértelo.
Forjaré banderas que lleven tu nombre,
y que allí donde estén presentes sepan que conocí a una mujer libre.
Tú aún no lo sabes, pero eres diferente,
por que cuando ríes, ríes,
y cuando lloras también lo haces,
o será que no puedo borrar tu sonrisa de mi mente,
ni cuando lleva el peor traje de gala.
Tú aún no lo sabes, pero estás encadenando un alma libre,
y jamás me sentó tan bien lo de sentirme un prisionero.
No quiero que salgas de mi mente,
aún menos de tu cama,
gírate, bésame, y clávame tu mirada,
que ya estaré perdido,
tanto, que necesitaré que me guíes en el camino de vuelta.
"Joder, insensato enamorado" estarás pensando,
y tienes razón, pero que voy a hacerle,
eres lo suficiente buena para estar con otro y estás aquí,
leyendo esta absurda carta,
a la que le faltan palabras para describirte.
Sí, si no te habías dado cuenta esta historia trata sobre ti,
y ojalá no sea la última que podamos escribir juntos.


Estación.

Comprendí que la vida es una estación,
por eso de la temporalidad,
las prisas y despedidas,
y aquellas personas que nos visitan.

Comprendí que hay trenes que se escapan,
otros que vuelven,
otros de los que es mejor bajarse a tiempo,
pero que nada sería lo mismo si nunca se hubiera cogido.

Por eso de que los trenes solo pasan una vez,
y que las vistas no son las mismas,
comprendí que los trenes se inventaron para viajar,
y que no tengo intención de bajarme en la primera parada.